Hola a todos, este post va dedicado a aquellos recursos de literatura que han sido sobreexplotados y de alguna manera, tan poco trabajados que los lectores se cansaron de ellos por ese motivo.
Mi intención no es ofender, si no hacer reir a las personas.
La otra vez lo hice con los recursos de películas, hoy con los recursos literarios. Aclaro que no sólo hablo de cuentos y poesías, sino también están incluídos en las películas, frases y canciones.
El loco
La literatura contemporánea se basa en la duda, en hacernos pensar sobre qué fue lo que quiso decir el autor. Un buen modelo para eso es mostrar un personaje con su visión, y que de alguna manera sepamos que ha perdido la razón. Entonces, ahí el lector comienza a dudar.
Desde El Quijote, siguiendo por los cuentos de Poe hasta las películas de actualidad, los autores nunca se han cansado de mostrar esos personajes, a tal punto que muchas veces son iguales unos a otros. El más común es el esquizofrénico, ya que te muestra un mundo que no existe.
No sólo eso: Las personas de hoy creen que ser loco está bien, inclusive es mejor que ser una "persona normal". Y nunca viene mal alguien que quiere ser loco o excéntrico y lo único que hace es llamar la atención y payasear.
Hay veces en el que nunca se sabe qué tipo de patología presenta, ya que se le mezclan unas con otras y terminan siendo algo así como un esquizofrenico bipolar, excéntrico, solitario, super inteligente y violento.
Sin embargo, este recurso se lleva el puesto 10, ya que hay muchas obras de éstas que están buenas.
El compromiso social
Durante las dictaduras, varios artistas se atrevieron a decir cosas muy controversiales, arriesgándose a ser exiliados o apresados. Creo que hay una gran diferencia entre eso y un cantante que dice ser vocero del pueblo y lo auspicia una marca. Y sí, la literatura también le concierne a los cantantes, y en esta ocasión, más aún.
Están los que dan nombre y apellido, y los que dicen "Uh, los políticos son todos unos delincuentes". Están los que toda la vida tocaron en un bar, y los que llenaron estadios.
Sin embargo, lo que importa son las letras. Hablo de esas frases que cualquiera puede agregar sin ir más allá de eso: "Son pobres porque los ricos son avarientos", "El mundo está sucio", "la iglesia nos miente". El tema es, si dice eso, por lo menos que lo diga de alguna manera poética. Si no, me quedo en las reuniones a escuchar a mi familia.
El mundo aparte
Estamos en plena generación Tolkien: Inventar universos y criaturas con sus propias leyes físicas te da gran prestigio. El tema es que a veces pareciera que alguien quiere simplemente vender, ya que puede convertirse en un Best-Seller o quizás quieran hacer una película con eso. Entonces comienzan a inventar bichos raros (Caballos con un ojo, ratones transparentes, lagartos-oso-humanos, etc) y lugares difíciles de imaginar (Frascos de telgopor, casas sin forma, montañas con ruedas, etc) e idiomas raros, que coinciden mucho con el latín.
Después de este torbellino de imágenes, suele haber poco para reflexionar, ya que la obra se centra en las sensaciones que produce.
El delirio
Esta no va dentro del personajes loco, se trata de un intento de surrealismo, eso que te hace parte de la literatura actual, o sea, de hace cien años.
La literatura no tiene límites, todos pueden darle su interpretación a cada obra. Ahí está el tema: Nunca sabremos si el autor lo hizo a propósito o no, si lo escribió para que lleguemos a pensar en lo que pensamos o no. Mucho más si se trata de un texto con doble lectura.
A veces la obra no te lleva por un camino en común, ninguna palabra con la que te puedas guiar y pensar de qué se trata. Entonces, las posibilidades de interpretación son infinitas, puede hablar de una dictadura o de un tipo que no se terminó un sanguche, y cada uno puede darle la interpretación que quiera y endiosar al autor, ya que se puede llegar a pensamientos hechos por el mismo lector.
En algunas poesías, pareciera que el escritor piense en un sustantivo, luego en un adjetivo, en un verbo y luego las junte.
Los rebeldes
Sé que pensarán que esto ya lo nombré, pero creo que el anterior pasa más por lo político.
Vivimos en una etapa mucho más liberal que antes. No es lo mismo ser gay, ateo o drogadicto ahora que antes. Lo más increíble es que aún hoy, existen los que piensan ser atrevidos por hablar de estos temas. Pero hoy en día es al revés, ya que muchas veces se utiliza el sexo como somnífero y es lo que vende.
Y lo más increíble aún, es que todavía hay quienes piensan que los escritores no pueden insultar porque deberían tener un lenguaje cuidado. Insultar pasó de ser atrevido, a normal y luego inmaduro en ciertos casos.
Libros de auto-ayuda
Lo más vendido en libros, ¿Por qué será?. Parece ser que la gente tiene muchos problemas. Básicamente, los textos son radiales: Se centran en que te pongas las pilas y mires en tu interior.
Siempre son un rejunte de normas morales establecidas desde el principio de la humanidad, "como el dinero no hace la felicidad", o "sólo preocúpate por ser tu mismo". Muchas veces van ligados a las religiones, diciendo que todas tienen los mismos principios (Si con todos nos referimos al cristianismo y a otras religiones orientales), y dándole su propia interpretación.
El amor
Es lógico que el tema más utilizado por la literatura se encuentre lleno de historias raras, repetidas y poco elaboradas. Cualquiera puede escribir sobre amor y por hacerse el caballero, por más que las señoritas no los conozcan y no sepan lo que es estar de novia con él.
Casi siempre se escribe sobre los mismos amores, y en la mayoría de los casos existen problemas en pareja.
Pero bueno, cuando se trata de amor, a todos nos concierne y no podemos negar que nos sentimos identificados por alguna canción, frase o poema.
Las contradicciones
La blanca obscuridad, la patada manual, el asado vegetariano, y una gran lista de antónimos sirven para crear un texto literario. Lo más increíble es que en cada una de estas analogías parece haber un sentido, al final, por que claro, la vida, el amor y las adicciones son una paradoja. Es muy fácil hacerlo: Busca una palabra, busca el otro extremo, listo. Si uno dice:
¿Cómo deshacerme de tí si no te tengo?
El artista tiene razón, aunque suene contradictorio.
Éste recurso es muy explotado, y lo mejor es que cualquiera que lo haga puede sonar a intelectual y profundo. Hace 400 años, Quevedo escribió que el amor era una herida que no se sentía, que era fuego helado, díganme si no han leído cosas por el estilo.
Las rimas
En un comienzo, las personas utilizaban las rimas para memorizar facilmente la lírica y hacerlo más divertido. Después se le agregó la métrica, para hacer la poesía aún más refinada. Luegi demostraron que no hacía falta la rima para que un poesía sea buena, aún así, mucha gente recurría a lo mismo.
Esa métrica se fue perdiendo, al igual que las rimas ya no necesitaban ser consonantes. Tampoco importaba si la coherencia, para muchos, si no rima la palabra, no es poesía.
Amor no es mucho, amor no es poco. Subí la palmera y bajame los cocos.
Entonces, ante un léxico poco abarcativo, se recurre a los intentos más desesperados por rimar. No importa si el acento se desplaza:
"Encima que los chetos son re gatós, encima los chetitos escuchan reggaetón"
Sé que el ejemplo se va a al extremo, pero sirve.
También usan las mismas palabras, cuando no encuentran otras. O si no, encuentran las palabras más trilladas que pueden haber:
Tierra con guerra. Ella con bella y estrella. Rosa con hermosa y preciosa. Cabeza con cerveza. Razón rima con amor y corazón.
En fin, en algunos casos lo único que importa es que rime, y no importa si la rima es consonante, no importa la métrica, no importa si rima bien. Tampoco importa si dice algo interesante, tampoco les interesa el uso del lenguaje.
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