Los científicos explican esta diferencia que comienza en la pubertad. La razón sería la mayor necesidad de oxígeno para alimentar la masa muscular.
En la niñez son casi iguales. Todo comienza cerca de los 11 años, con los cambios hormonales.
Sin incomodar a los varios Cyrano de Bergerac y al inolvidable Pinocho –y todos los personajes famosos por "tener una nariz"- lo cierto es que la nariz de los hombres es en general más grande que en las mujeres, y la propensión a las mentiras no tiene nada que ver.
Si usted se preguntó al menos una vez en la vida por qué, un nuevo estudio publicado en la American Journal of Physical Anthropology puede responder a su pregunta.
La primera explicación importante es que esa diferenciación entre ambos sexos comienza en la pubertad: hasta poco tiempo antes, de hecho, las naricitas de los varones y las niñas son más o menos iguales. Pero cuando las hormonas empiezan a dar vueltas alocadamente, se produce la transformación.
Los varones tendrían, en esencia, necesidad de narices más grandes porque necesitan más oxígeno para alimentar la masa muscular en vías de mayor desarrollo que en las mujeres.
Esto es lo que descubrieron científicos de la Universidad de Iowa, que consideran la diferencia de dimensiones nasales como una consecuencia de las composiciones distintas de ambos sexos y las exigencias de energía. Los varones, explican los científicos, en general poseen una masa muscular magra, que exige más oxígeno para el crecimiento y el mantenimiento del tejido muscular. Las narices grandes significan por ende más oxígeno, para proveer al músculo, que pueda ser inhalado y transportado en la sangre.
Esta diferenciación entre varones y mujeres se produce aproximadamente a los 11 años, edad que se asocia generalmente al comienzo de la pubertad. A partir de ese momento, los varones comienzan a acumular masa magra a diferencia de las mujeres que comienzan a incorporar masa grasa.
"Esta relación se ha discutido mucho en la bibliografía –subraya el doctor Nathan Holton, autor principal del estudio- pero este es el primer estudio longitudinal que examina cómo se relacionan las dimensiones de la nariz con las dimensiones del cuerpo en varones y mujeres".
"Hemos demostrado que al crecer la dimensión del cuerpo en hombres y mujeres durante el desarrollo, los varones exhiben un aumento desproporcionado de las dimensiones nasales –agrega Holton. Esto sigue el mismo patrón que las variables energéticas como el consumo de oxígeno, la tasa metabólica basal y el consumo energético diario durante el crecimiento".
Queda así explicado por qué las narices de los hombres son más grandes. Y si alguien se atreve a ironizar sobre el tamaño de su nariz, ya sabe qué responder.
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