El Ministerio de Defensa ruso lleva años trabajando en un equivalente de diseño y fabricación nacional de los programas de Soldado Futuro que están en marcha en la mayoría de países occidentales. En breve iniciará la compra de los primeros lotes del equipamiento del soldado del futuro Ratnik, programa que se compone de 40 elementos que van desde el equipamiento personal, comunicaciones avanzadas portátiles, sistemas de armas con visores mejorados, sistemas de alimentación eléctrica o chalecos blindados de nuevo diseño.
En estos momentos el programa está en la fase final de pruebas y se espera que para octubre de este año comience la adquisición de los primeros lotes para el despliegue según el propio Ministerio de Defensa ruso. Durante el primer año se podrá ver si existen problemas o fallos de diseño que puedan ser reparados e incorporados al diseño.
Esta suite de equipos podrá ser empleada por la infantería, paracaidistas, operadores de cohetes, sirvientes de ametralladoras, conductores y unidades de reconocimiento. En el programa participan cincuenta empresas rusas y aunque no se conocen todavía todos los detalles, se dispone de equipos de protección individual de material cerámico, monos ignífugos, cascos con sistemas de presentación de datos del arma principal y cámara para grabación, además de sistemas de navegación por satélite GLONASS.
Sin embargo no hay una decisión final sobre el arma, ya que se han evaluado el AK-12 de Kalashnikov y el AEK-971 de Korov, en cualquier caso irá dotada de modernos elementos de puntería óptica, incluyendo visores térmicos y la posibilidad de transmitir las imágenes al casco. (J.N.G.)
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